Como hemos visto en el área de estudio anterior, un exceso de hierro puede comprometer nuestro estado de salud, sin embargo, el déficit de este también puede comprometerla. Una insuficiencia en los niveles de este mineral puede favorecer una mayor sensación de cansancio, piel pálida y la caída del pelo, entre otros. Existen una serie de factores capaces de afectar estos niveles como menstruaciones abundantes, práctica excesiva de deporte y sangrados. Para conocer si estás realizando una ingesta de hierro suficiente para tu organismo hemos de consultar los niveles de determinados parámetros analíticos relacionados con el metabolismo de este.
