Las fracturas por estrés ocurren cuando el hueso pierde la capacidad de tolerar una carga mecánica de forma repetitiva, y se caracterizan por un daño en la micro-arquitectura del hueso, sobre todo de extremidades inferiores. Altamente relacionadas con prácticas con elevada actividad física, como el deporte, pueden tener causas muy diversas como entrenamiento previo, biomecánica e incluso cierto grado de susceptibilidad genética. Variantes en los genes que participan en la vía metabólica encargada de la activación y diferenciación de los osteoclastos (células encargadas de absorber el tejido óseo) nos dan información sobre la predisposición a desarrollar este tipo de lesiones.
Política de Cookies
Éste sitio web y sus subdominios relacionados utilizan cookies propias y de terceros con la finalidad de mejorar los servicios prestados a través de este, para finalidades analíticas, publicitarias y de seguridad.
En las pestañas de esta pantalla encontrarás información sobre las demás cookies que utilizamos, tanto las nuestras como las de terceros, y cómo aceptarlas o rechazarlas.